A pesar de que
Cyclone y Venus son los dos tratamientos reductores más revolucionarios del mercado estético actual, lo cierto es que el LPG sigue siendo uno de los más demandados.
Es especialmente efectivo si se combina con otros tratamientos, como los nombrados Cyclone o Venus, sobre todo si disponemos del último modelo de LPG con todas su nuevas prestaciones, que salió al mercado el pasado mayo, y nuestros 20 años de experiencia aplicándolo con resultados contrastables.
QUÉ ES LPG Y PARA QUÉ SIRVE
El significado de LPG es “Lipomassage”. Son unos rodillos motorizados que se desliza por las zonas a tratar para combatir los excesos de grasa localizada, consiguiendo dirigirla a vía linfática para su posterior eliminación.
Esta tecnología consigue reducir un volumen de forma considerable, desintoxicar el organismo, mejora la celulitis y los tejidos adiposos. Desfibrosa y mejora el flujo circulatorio y linfático de los tejidos, elimina toxinas y controla las inflamaciones.
CÓMO FUNCIONA
Para el tratamiento se utiliza una malla que cubre todo el cuerpo, la utilizamos para que no se produzca daño en la piel y como medida de higiene. Con los rodillos vamos tratando las zonas más afectadas (muslos, piernas, etc), pero también se le dedica tiempo a otras áreas para estimular la circulación y acelerar la eliminación de grasas y toxinas, especialmente en abdomen y espalda.
Las sesiones duran de 35 a 60 minutos aproximadamente, el seguimiento adecuado es realizarlo 2 veces por semana. Es un tratamiento totalmente indoloro.
CUÁNDO VEO RESULTADOS
Los resultados los podemos apreciar desde la primera sesión, enseguida comenzaremos a notar una reducción de volumen seguido de un aumento del número de micciones. También una ligereza en las piernas, la piel la iremos encontrando más lisa y suave a partir de la 6-8 sesión. Estas sesiones son relativas a cada persona, por ello los tratamientos son personalizados. Es aconsejable una media de 12 sesiones para conseguir óptimos resultados.
RECOMENDACIONES
Durante el tratamiento es aconsejable beber alrededor de 2 litros de agua diarios, con el fin de que todo lo que vayamos movilizando con el LPG, lo ayudemos a eliminar por la orina. También es muy recomendable para conseguir mejores resultados, practicar un poco de ejercicio y que cambien los hábitos alimenticios hacia una dieta más equilibrada y saludable.